En estos controles, se impide que los motociclistas sin casco protector carguen combustible en sus motos.
Este lunes por la noche, inspectores se ubicaron en los accesos a las estaciones de servicio del micro y macrocentro, verificando el cumplimiento de la medida. Solo los motociclistas con el casco debidamente colocado pudieron acceder a los surtidores.
Aquellos que no contaban con este importante elemento de seguridad no tuvieron autorización para cargar combustible.
Según informaron desde el área, en la mayoría de los casos, playeros y encargados celebraron esta medida, aunque en algunos casos hubo resistencia.
Esta acción se enmarca en la Ley 7.272, sancionada por la Cámara de Diputados de la Provincia, que implementa el programa de concienciación vial «Sin casco no hay combustible».